Hay hambre de vivienda nueva en Vigo. Tras años con el sector en estado comatoso por efecto de la crisis del ladrillo y una larga etapa al ralentí marcada por la caída del PXOM de 2008 –etapa que solo empezó a despejarse en 2019, con la aprobación de la ordenación provisional (IOP)– en la ciudad se registra una bolsa de demanda que las inmobiliarias se están lanzado a cubrir. Grandes promociones, como las de Cordelerías Mar, Barrio do Cura, San Roque o las que se extienden por Rosalía de Castro, son un ejemplo claro. La tendencia, sin embargo, está lejos de circunscribirse a barrios concretos. Alcanza Navia, donde hay proyectos cooperativos con la vista puesta en la próxima ampliación del polígono residencial. Y llega también a Sanjurjo Badía, en Teis, un barrio que está a punto de sumar casi medio centenar de apartamentos nuevos.