Doñihue, Chacolí, Chamantos y Aguardiente.
TEBNI PINO
Vivir la infancia en un pueblo chico no tiene comparación. Doñihue, ese pequeño pueblo de la región de O´Higgins no tenía ninguna calle pavimentada cuando el tren de las 23:00 que todos los días hacía el recorrido Rancagua-Coltauco frenó su lento transitar y de allí bajó mi padre y la familia, trasladado por el servicio de Registro Civil para hacerse cargo de la oficina comunal. Corría el año 1954 y un humilde carretón necesitó tan solo dos viajes, para llevar las sillas y mesa de mimbre, además de las camas y algunos utensilios de cocina.