(2015-2019).
La decisión fue adoptada por el Juzgado Comercial 6, a cargo de la jueza Marta Cirulli, tras el fracaso del concurso preventivo de acreedores de la empresa, abierto en setiembre del 2001, y del intento de salvataje de la firma.
Ese proceso de salvataje fue abierto en agosto del 2020 por resolución de la propia magistrada con el objetivo de buscar posibles interesados en adquirir el capital social de Correo Argentino y formular una eventual propuesta de acuerdo preventivo a los acreedores.
En esa instancia se presentaron seis firmas interesadas, pero finalmente solo Coreo Argentino mantuvo interés en proseguir con el proceso.