Marcus Walz hizo historia de nuevo colgándose la medalla de plata en la final del K4 500 metros de los Juegos Olímpicos de Tokio, siendo solo superados por Alemania. Cinco años después de subir a lo más alto del podio en Río 2016, el palista del Real Club Náutico del Portopetro dio otra gran alegría al deporte mallorquín y balear en la pista del Sea Way Forest de la capital nipona.