Luis Díaz
jugó, inventó, corrió, hizo un golazo, se comió la cancha, realizó jugadas cargadas de magia y estuvo imparable. Así se erigió como la gran figura del encuentro que este martes perdió la Selección Colombia en la definición por penaltis 3-2 frente a Argentina.
¿Qué más se puede decir del guajiro? El crecimiento que ha tenido el atacante del Porto, de Portugal, es exponencial y así lo ha dejado en evidencia, a lo largo de la actual edición de la Copa América, en territorio brasileño.
Después de lo hecho frente a Brasil, en fase de grupos, donde anotó un gol de media chilena, y de su excelente presentación contra Uruguay, por los cuartos de final, ahora, contra Argentina, explotó definitivamente.